Tras unos negocios entre Arístides Ruiz y Rodrigo Arciniegas, los cuales terminan en la muerte de Arístides, sus dos hijas: Isabela y Mariana son separadas y toman rumbos totalmente distintos.

Por un lado Mariana, quien cambia de nombre a Soledad, es criada en humildad y en pobreza, junto a una madre adoptiva y su abuela, haciendo de ella una muchacha trabajadora y sencilla, pero por el contrario su hermana Isabela es criada en lujos y comodidades, y por eso es soberbia y caprichosa.

Sin embargo el destino hará que estas dos hermanas vuelvan a encontrarse pero de una manera no muy favorable pues ambas están enamoradas del mismo hombre, Alejandro Arciniegas, hijo del asesino del padre de ambas.